Estamos de suerte en la Coruña. A lo largo de este mes han abierto las puertas dos tiendas nuevas estrenando imagen, Hoss Intropia y Oysho, y ha aterrizado por primera vez en la ciudad Sandro. Ya sabéis de sobra mi debilidad por las primeras, y Sandro no la conozco mucho más que de forma online, pero más adelante seguro que aparece por aquí.
La zona que han elegido es el centro de la ciudad, en los alrededores de la plaza de Lugo. Manzanas de casas típicas de la Coruña con sus galerías, y con portales y bajos comerciales que quitan el hipo.
En los primeros post del blog, os contaba mi compra frustrada de una
Lotus Flower Lamp, y como mi obsesión hacia ella había crecido al verla en la tienda de Oysho que había abierto en un nuevo centro comercial. Puedo decir que el estreno de la imagen se remonta aquel momento, pero al ver la reforma que han llevado a cabo en esta céntrica tienda, me ha confirmado mis sospechas.
Algo en Oysho está cambiando, y es su interior.
Así que totalmente decidida a iniciar una labor de investigación, que me he llegado al contemporainstudio
Lázaro Rosa-Violán.
En su web hablan de los dos proyectos realizados Oysho1 y Oysho2.
Oysho1-Worldwide
"Oysho es la línea de lencería de Inditex, creadores de Zara, el gigante internacional de la moda. Para llevar a cabo este proyecto, Lázaro Rosa-Violán se inspiró en el diseño de las antiguas boutiques francesas de lencería y utilizó percheros de hierro forjado, maniquís de modista, muebles tallados y cajas y cajones de madera natural. En la decoración se han usado tonos cálidos, tostados y neutros sobre superficies mates que facilitan la visión de las telas con frecuencia brillantes —satén y seda— utilizadas en lencería. Fotografías de retratos en blanco y negro y la imaginería del poster prestan al establecimiento un toque muy personal, como si el cliente comprase en un entorno privado."
Oysho2-Paseo de Gracia 67, Barcelona.
" La nueva tienda (...) rompe sutilmente con los otros establecimientos mediante la utilización de una paleta de colores oscuros y unos toques orientalistas que complementan el espíritu romántico de la marca. En esta boutique, ubicada en un edificio del siglo XIX del bulevar más emblemático de la ciudad, se han instalado techos inspirados en el estilo original de la época, mientras que los suelos de pizarra gris, la madera natural y las superficies blancas crean una calidez orgánica. El mostrador a medida está revestido de espejos tallados con motivos japoneses y los armarios altos muestran coloristas gráficos retro, que pueden reemplazarse por material publicitario de la marca, según las necesidades."
A mí poco más me queda por decir, sólo que en este caso las imágenes no hacen justicia a la realidad, porque las nuevas tiendas son más bonitas de lo que se ve, tanto, que te vas con la sensación de querer vivir en ellas....
Biquiños
Clara